22 de noviembre de 2018

Muerte de la luz

Sinopsis:

Esta es la primera obra publicada de George R.R. Martin, autor de la aclamada saga Canción de Hielo y Fuego.

Entre las páginas de esta novela, encontramos una historia que nos llevará a un lejano futuro en el que los humanos conviven con diferentes civilizaciones del universo. Dirk, nuestro protagonista, recibirá la joya de su ex-novia, Gwen, haciéndole recordar la promesa que se hicieron tiempo atrás en la que debían acudir en ayuda el uno del otro, en el momento en que recibieran la alhaja.


Opinión:

No es la primera vez que leo algo de ciencia ficción escrito por este hombre y, debo admitir, que me fascina todo lo que escribe; sin importar el género de la obra. Sabe perfectamente cómo hacer que el lector viaje a esos mundos que tan bien nos describe y que no quieran irse de ellos. Y, mucho menos, olvidarlos...

En esta ocasión, viajaremos a Worlorn, un planeta bastante alejado de la Tierra y que se está sumiendo en la oscuridad porque, poco a poco, se va alejando de sus siete soles; como suele ocurrir cada cierto tiempo. Podríamos decir que es un planeta muerto, ya que poca vida alberga en los últimos años. Es allí donde Dirk se reencontrará con Gwen, deseoso de descubrir en qué clase de peligros se encuentra para que le pidiera ayuda. Pero claro, tras tantos años sin mantener el contacto, se encontrará con ciertas sorpresas como que ella está unida a un miembro de un antiguo clan que, a día de hoy, mantienen unas costumbres muy curiosas. Tanto, que me atrevería a decir que el señor Martin se basó en estas tradiciones para crear las de los Dothraki, puesto que tienen ciertas similitudes en común.

En conjunto, Muerte de la Luz me pareció muy interesante y original. Me fascina la facilidad y el ingenio del autor para crear mundos y culturas tan dispares y que se haga tan agradable adentrarse en ellos. Y siempre encontraremos personajes con los que es fácil identificarse. No todos son buenos y malos porque sí, y ya está. No. Me encanta esa ambiguedad, esa humanidad, esa personalidad de que el bien y el mal está en el interior de los personajes y que casi siempre hay un motivo para que hablen o actúen de una forma u otra. Esos detalles, a parte de la trama y los pequeños detalles que hacen que la historia sea más redonda, es lo que admiro de Martin.

Resumiendo, es una novela que, aunque no sea tan grande como Canción de Hielo y Fuego, tiene unas características que dotan a la lectura del atractivo suficiente para que cualquiera que lo tenga entre sus manos, disfrute de principio a fin. Sobre todo, con las descripciones y conocimientos de las culturas y emplazamientos que se presentan. En mi caso, es lo que más llamó mi atención, a parte de las prácticas de la pareja de Gwen.

Si sentís curiosidad, que espero que así sea, podéis encontrarlo en el catálogo de la editorial Gigamesh ;)

2 comentarios:

LaEmperatriz dijo...

Si te digo la verdad nunca he leído nada de este hombre, ni siquiera Juego de tronos. Bueno, es que ya al ver esos tochos me echan para atrás XD
Sin embargo, esta historia suena bien. ¿No es una saga, no? Le echaré un vistazo.

Un beso!

Scarlet dijo...

No es saga, no; y se lee bastante bien. Échale un ojo también a "Los Reyes de la Arena" (Sandkings), que también puede gustarte :3

PD: ¡¡Léete Canción de Hielo y Fuego!! Te va a encantar mucho, aunque sean tochos xD